CAPITULO PRIMERO: EL MARCO.
La situación diferencial en la península respecto del Occidente cristiano pasa por la existencia de dos zonas diferenciadas y el gran enfrentamiento continuado que significa el aumento del territorio cristiano frente al musulmán. Esfuerzos parciales de los diferentes reinos. Éstas serían las semejanzas pero son más las diferencias A fines del siglo XI, se produce un cambio de tendencia definitivo en detrimento de los reinos musulmanes. La batalla de las Navas de Tolosa marca ese futuro. El cristianismo se extiende desde mediados del siglo XIII y se cierra la Edad Media cuando la voluntad conjunta de Aragón y Castilla ponen fin a la existencia de los nazaríes granadinos. Consecuencias de esa expansión es la repoblación de territorios, entrada de riquezas -que revierte en la monarquía, la Iglesia y la aristocracia-, la población de mudéjares aumenta notablemente;muchos de ellos se dedicara´n a la agricultura (como es el caso de los reinos Valenciano y Murciano), sin embargo, en otras zonas como en Aragón, la actividad artesanal se intensifica hasta el siglo XIV, aunque esto vaya en detrimento del gótico, que en ningún momento peligra. En el sur, el gótico, entró con lentitud; todavía se realizan monumentos de estilo nazarí como es el caso de la ampliación de los Alcázares Sevillanos promovidos por Pedro el Cruel. Sevilla y Valencia compiten con las ciudades del norte y se construyen edificios de un gótico tardío.
Todo el proceso de inmersión del gótico en la península Ibérica debemos situarlo en el norte y , en concreto, en la fortaleza adquirida desde Fernando III por el Reino de Castilla, quien unifica en su corona Galicia y Castilla. Los centros más vitales son los castellanos, como la ciudad de Burgos: centro político, religioso y progresivamente económico; y Toledo, cabeza religiosa del viejo neovisigotismo cristiano.
La "invasión gótica", en este caso, no se sitúa en el eje este-oeste sino en el norte-sur. Las canterías se ubican en Burgos y León y siempre realizan elementos importados del gótico francés; no obstante, existe una industria de importación, así lo reflejan las fuentes, que hablan de contactos con Inglaterra y Países Bajos y que se gesta en incipientes relaciones comerciales iniciadas en Bilbao y, que después, llegan a Sevilla, Cartagena o Palma de Mallorca. Los ricos territorios del Ducado de Borgoña y el condado de Flandes sustituirán a Francia desde el siglo XIII como foco de influencia.
En el siglo XV, Santiago de Compostela se convierte en una sombra de su poder e influencia en épocas anteriores. Son Toledo o Sevilla los centros más importantes en construcción gótica en donde encontramos a artistas italianizantes a lo largo del recorrido del eje: Burgos-Toledo-Sevilla.
El arte del siglo XIII en Castilla será obispal y real, y sólo en el XV se añadirá con extraordinaria pujanza y fuerza la alta nobleza. En la corona de Aragón existen diferencias sustanciales entre Aragón y Cataluña. Aquí será donde se desarrolle una burguesía comercial emprendedora y, progresivamente, potente. Alfonso el Magnánimo, se encarga de tender los puentes con la Italia de la época y la instrucción en sus artes de nombres como: Guillén Sagrera, Jaco Martí o Pere Johan.
La más exquisita pintura del gótico lineal tardío peninsular se encuentra en Navarra, un territorio sin posibilidad de expansión en la llamada reconquista.
CAPÍTULO II: LOS PROTAGONISTAS
COMITENTES, PROMOTORES Y CLIENTES.
No se puede hablar nunca de mecenazgo; sí hubo preferencia por unos u otros artistas, como en el caso del Obispo Mauricio de Burgos promotor de al nueva catedral de Burgos después de conocer las inmensas estructuras de Amiens, Reims o Bourgues. Los promotores por tanto pertenecen a la Iglesia, monarquía y alta nobleza. existen casos irregulares como el Alfonso X "el sabio",que por sí solo y su propia voluntad anima una corte de ilustradores de varios "gustos" estéticos. Tenemos a Elisenda de Moncada en Cataluña cuya familia a través de sus encargos introducen el gótico internacional en Aragón con maestros como Pere Bonhull, Ferrer Basa o Pere Joan que esculpe el retablo mayor de la sede de Zaragoza; Jaume Cascalls o el Maestro Aloy son los artistas preferidos por Pedro el ceremonioso. Es decir, Arzobispos y monarcas actúan como promotores de las obras que encargan. Promotores y clientes. El Encargo en sí es ajeno a la calidad artística o estética: son otras las relaciones que someten al arte de encargo (fines religiosos: litúrgicos, culto a los santos) también el deseo de glorificar el linaje o la propia persona a través del sepulcro. Tenemos ejemplos como los mencionados de la creación de la catedral de Burgos por el obispo Mauricio o en el estamento noble`tenemos como promotores al rey y su familia, aunque siempre hay excepciones en un sentido y en el otro tal vez el más aplaudido desde el punto de vista de la creación artística sea el del mencionado Alfonso X, cuyo gusto por las artes plásticas le convierte en una realidad sin continuidad en el tiempo, pero intervino no sólo en las obras artísticas literarias sino también en en ilustraciones (Lapidario, libro del juego de las damas y del ajedrez, primera partida de Londres y las cantigas de Santa María) Según Yarza Luaces existe un estilo Alfonsí sin continuidad en el tiempo.
En Aragón Jaime II y la reina Elisenda de Moncada ayudan a incorporar plenamente el gótico en Cataluña a través de la creación de los sepulcros de Pedro el Grande y el suyo propio a grandes escultores de procedencia francesa (Pere Bonhull). Se realizan esculturas de los reyes Jaime y Blanca de Anjou en el monasterio cisterciense de Santes Creus. En ese periodo se ilustran obras que conocen las tendencias parisinas o se establece relación epistolar con el Duque de Berry y se introduce la pintura italianizante con Ferrer Bessal (1324). Todo ello afecta, definitivamente, a los condados de Ampurias, Prades y Urgel. Juan I y Martín el humano son aficionados a los iluminados manuscritos del gótico internacional, de su gusto nace por ejemplo el breviario de Martin el Humano que se conserva en la biblioteca nacional de París).
Alfonso el Magnánimo pudo ser el introductor del temprano renacimiento en la corona de Aragón, en donde se produce un trasvase de pintores entre los territorios catalanes y y el sur de Italia. (La virgen de la Anunciada, museo cívico de Como, atribuida erróneamente a Antonello da Messina y que bien podría ser de Jacomar; "El triunfo de la Muerte" o "san Jerónimo en su estudio" de Collantonio en Palermo).
En Castilla el atractivo de la pintura flamenca es previo a Isabel la Católica que colecciona obras muy distintas: tablas, libros miniados, tapices y otroso objetos en los que mucho tuvieron que ver Juan de Flandes, Miche Zitón y al "aún no comprensible" maestro de los reyes católicos. Esta valoración implica una relativa negación del Renacimiento.
San Juan de los Reyes en Toledo, La Capilla Real de Granada, quieren prestigiar a la monarquía. Según Yarza hay que desmentir la existencia de un estilo Isabel. (La Cartuja de Miraflores de Gil de Siloe) es el lugar de entierro de de Juan II y su esposa y el desaparecido infante Alfonso.
Se produce así un efecto de exaltación del linaje y la dinastía familiar en ejemplos como el Alcázar de Segovia en donde Alfonso X mandó construir imágenes de los reyes castellanos, Pedro el Ceremonioso con las estatuas reales del maestro Aloy busca engrandecer el sepulcro de "Cap de Stopa" en la catedral de Gerona.
En navarra, Carlos el Noble, decide enterrarse en la catedral nueva de Pamplona y cuenta con el francés Janin de Lomme.
También las Reinas desarrollan una acción paralela como promotoras y comitentes: Monasterio de Pedralbes, en donde se retiró Elisenda de Moncada y que constituye uno de los edificios góticos esenciales de Cataluña. María de Navarra deja un "libro de horas" que se conserva en la biblioteca Marciana de Venecia. Y, lógicamente, la nobleza sigue sus pasos con encargos de sepulcros como el "Téllez de Meneses" en los monasterios de Palazuelos y Matallana (Valladolid), o el sepulcro de Martín II Rodríguez de León, el sepulcro del infante rebelde de Alfonso X, Felipe, y su esposa en Villalcázar de Sirga (Palencia). En Galicia el sepulcro de tosca labra de Fernán Pérez (O Boo) en Betanzos en el 1382; también el sepulcro del Obispo Domingo de Arroyuelo o el de los Armengol (nueva york), Moncada (Lérida), Hugo de Copions (Museo de Solsona) o la realización del retablo dedicado a los Santos Juanes.
Pero es. tal vez, la nobleza y su deseo de inmortalizar su recuerdo, quien se convierte en promotora activa de multitud de obras artísticas , no sólo ajuar suntuario sino también sepulcros como los ya mencionados, y muchos otros ejemplos de altares y retablos como el retablo mayor de la Iglesia de San Nicolás de Burgos. A mediados del siglo XV, la crisis de la nobleza catalana, el escaso interés de la navarra , el ascenso de la aragonesa y el inmenso poder de la nobleza castellana, inciden consecuentemente sobre la producción artística: Convento de Santa Isabel en Toledo, Santa Clara de Palencia, Convento de Santo Domingo de Portaceli.
Ya en el siglo XIV se levantaban espléndidas residencias señoriales: el castillo de Mesones de Izuela, Palacio de Escalona (Álvaro de Luna, quien al mismo tiempo, encarga su sepulcro en en la capilla de su propiedad en la catedral de Toledo, realizado por Hanequín de Bruselas)Palacio del Infantado en Guadalajara de Juan Guas. También los Velasco deciden enterrarse en una de las capillas de la catedral de Burgos, y comienza un coleccionismo muy extendido entre las clases nobles de todo tipo de tapices, alfombras, esculturas y piezas de orfebrería.
En todos los reinos de la Corona de Aragón nace un creciente protagonismo de los ciudadanos, de forma colectiva, casi siempre, gremial o como cofradías piadosas, ayudan al florecimiento de artes mobiliarias y suntuarias. En Cataluña, la inmensa mayoría de los retablos (de autores como Serra o Ajume Huget) se realizan en estas condiciones. No ocurre lo mismo en Navarra o en la Corona de Castilla, en donde son La iglesia y la Nobleza los principales patronos. Sólo los hombres de la Iglesia ocuparían un listado extensísimo en su papel de promotores artísticos. En el siglo XIII en Castilla y León la actividad más intensa es obra de los obispos: Burgos, Toledo, León, Burgo de Osma, Ávila, Sigüenza, Tarazona (Mauricio de Burgos, Ximénez de Rada o Alonso de Cartagena. Son muchos los obispos quienes desean enterrarse en las construcciones promovidas en sus dominios pero también se usan esas construcciones, como hemos visto, para atraer financiación extra con la que contratar a los mejores maestros canteros -es el caso de Alonso de Cartagena que contrata a Juan de Colonia para que lleve a cabo las agujas de la catedral de Burgos ) u otro tipo de obras como el misal de Santa Eulalia de Rafael Destorrents.
Señala Yarza Luaces, que el desarrollo de las ciudades supone también la creación de barrios dotados con parroquias que promueven el crecimiento de la artesanía "artística". (Santa María del Mar en Barcelona, Santa María del Pino o Santos Justo y Pastor´; o monasterios ya mencionados como el de Santes Creus y Poblet, monasterio de San Pedro de Arlanza ( que presume de contener los restos de Fernán González) o el monasterio de San Pedro de Cerdeña ( en donde supuestamente se encuentran los restos mortales del Cid Campeador). Hablamos de monasterios por un motivo esencial: viven distintas suertes a lo largo de los siglos del gótico. Nace un enfrentamiento generalizado entre clero secular y regular, y además aparecen la nuevas ordenes mendicantes que se establecen en núcleos urbanos (Convento de los Franciscanos de Palma). La acción de estas órdenes fue la de multiplicar el número de retablos, pinturas, abalorios eclesiásticos. (monasterio del Parral)
LOS ARTISTAS
Hemos hablado de los promotores y también, tangencialmente, de los clientes; pero, los artistas según define Yarza Luaces, no pueden nunca llamarse así "para una mentalidad medieval es más importante el cliente que el artista. ...Y esto es un problema de condición social". En el siglo XIII, se produce un cambio importantísimo: el asentamiento del artesano en la ciudad(nace un profesional laico, que oferta sus servicios y que regularmente sella ante notario. Cómo anécdota de lo inusual del mecenazgo y lo impropio de usar ese término en los siglos del gótico recordemos como Fernando II ofrece una pensión vitalicia a Mateo de Compostela, es cuando realiza el pórtico de la Gloria). La documentación del siglo XIII es muy escasa pero de la existente se deduce que todos los nombres que aparecen en ella tienen un afincamiento urbano: Pedro Guillermo (pintor,1264,León) Berenguer (pintor de Villa Vici,1224-1287), Pere Closelles-1244- Arnau Camps de Vic: " Cantoral de la Espeja en la Catedral de Burgos.
Hay dos asuntos extremadamente importantes para Yarza Luaces en el entorno de los artistas; por una parte, tenemos a una gran inmensidad de artesanos que no forman parte de gremios, cuya relación teórica con el arte es escasa, y su único fin el de crear un negocio a la altura de los gremios de plateros que pueda tener cierta continuidad en el tiempo, cosa que no consiguen, debido a que según las fuentes documentales, en muy excepcionales casos los talleres que pasan a manos de padres a hijos, lo hacen después a manos de los nietos, y si así ocurre, pocas son las veces que el taller tiene una continuidad en el tiempo. En cuanto a la formación de los artesanos, hace una distinción entre arquitectos y maestros de taller, interesados los primeros algo más por aspectos teóricos del arte que los segundos, en cuya relación de testamentos no legan ni un solo libro.
CAPITULO 3: LAS FORMAS.(continuará)